En los últimos años estamos asistiendo a un cambio de mentalidad. Y es que cada vez se piensa menos en tener un coche en propiedad y se apuesta más por modelos de alquiler en los que se paga una cuota fija al mes para tener un “todo incluido”. No es de extrañar si tenemos en cuenta las circunstancias actuales que estamos viviendo: el creciente precio de los coches (en lo que va de año ha subido casi un 6% de media), la incertidumbre de cuál será su valor a futuro y el mayor número de restricciones de circulación en el centro de las ciudades (a partir de 2023 los municipios con más de 50.000 habitantes deberán contar con una zona de bajas emisiones).
Todo esto potencia las fórmulas de alquiler frente a las de compra. Es por ello que cualquier modelo de alquiler que lleve ese sello de “todo incluido” va a ir a más. Es decir que la suscripción, el carsharing y, por supuesto, el renting, entre otros, son modelos que experimentarán un gran crecimiento en los próximos años y que ya empezamos a ver reflejado en las estadísticas.
En el caso del renting, las cifras hablan por sí solas. Esta modalidad ya supone el 26,08% del total de matriculaciones (según datos del mes de septiembre) y la flota de vehículos de renting a particulares se ha multiplicado por cinco en el último lustro. Los avances en este sector se enfocan ahora en aportar un valor añadido a los usuarios que apuestan por él. Y en este sentido, el modelo de subrogación de contratos de renting flexibiliza este sector al ofrecer una solución muy económica a quien necesita realizar una cancelación anticipada (al no tener que hacer frente a los elevados costes de dicha cancelación, que suelen suponer el 50% de las cuotas pendientes) y al abrir las puertas a quien hasta ahora no se atrevía a contratar un renting precisamente por esa penalización y por los contratos a largo plazo.
No es la única ventaja para el usuario que quiere probar el renting. En comparación con otros modelos de alquiler de vehículos como el rent a car o el coche por suscripción, el renting por subrogación permite disponer de un coche que se ajuste a sus preferencias y necesidades en ese momento. Es posible elegir el vehículo con el plazo de compromiso y la cuota mensual que esté dispuesto a asumir, así como el modelo y las características concretas deseadas (color, número de plazas, motor, potencia, transmisión, tracción…) Esa flexibilidad hace que el vehículo no frene los posibles cambios personales o profesionales de una persona.
Además, tiene la garantía de que ha sido utilizado por un solo usuario y está en perfecto estado, y que todos los trámites del traspaso con la entidad de renting son gestionados por un equipo de expertos. Y es que el asesoramiento personalizado sobre las ventajas y los posibles riesgos del contrato de renting al que quiere subrogarse, y el acompañamiento a lo largo de dicho proceso de subrogación, son dos puntos cruciales para el éxito de esta fórmula.
Por último y no por ello menos importante, cabe mencionar lo que puede aportar el renting a la movilidad sostenible. Esta fórmula brinda la oportunidad de probar modelos de coches que tienen un menor impacto medioambiental, como los híbridos o eléctricos. Según datos de la AER (Asociación Española de Renting de Vehículos), el 31,95% de las matriculaciones de renting ya corresponden a vehículos de energías alternativas.
Es por ello que las fórmulas, como la subrogación de contratos de renting, están llamadas a jugar un papel decisivo en el futuro de la movilidad, porque consiguen aunar la exclusividad de disponer del modelo de coche concreto en excelentes condiciones y que tiene las prestaciones buscadas, con la practicidad de pagar una cuota mensual asumible a un plazo más corto y, por tanto, correr menos riesgos en una situación tan inestable como la actual.
Porque es así. Se avecinan años de numerosos cambios en el sector de la automoción, pero si hay algo de lo que no cabe ninguna duda es que el futuro de la movilidad pasa por fórmulas de alquiler cada vez más personalizadas y que ofrezcan a los usuarios facilidad de adaptación, agilidad y un todo en uno. En otras palabras, el futuro de la movilidad pasa por el renting flexible.
Ángel Sánchez,
Socio y director de Linkerdrive